¿Te interesa la industria musical? La clínica de Ben Koller es para vos
El baterista estadounidense Ben Koller —reconocido por su trabajo con Converge, Mutoid Man, Killer Be Killed y High on Fire— llega a Costa Rica para ofrecer una clínica que promete ser mucho más que una clase magistral de batería: es una experiencia que conecta arte, industria y sostenibilidad. Se llevará a cabo el próximo 30 de agosto en La Concha, Barrio La California, de 3:00 p.m. a 6:00 p.m.
Koller abrirá la conversación sobre lo que implica vivir de la música en la actualidad. La clínica abordará desde la construcción y narrativa de los drum riffs hasta el valor de la propiedad intelectual, las licencias y la monetización, invitando a reflexionar sobre el delicado equilibrio entre creatividad y negocio en una industria que no deja de transformarse.
Como parte de la experiencia, Ben Koller y Costaphonics, crearán en vivo bases rítmicas a partir de sonidos naturales de Costa Rica, que se presentarán durante la clínica como un ejemplo de cómo integrar naturaleza, arte y tecnología. Esta obra musical será lanzada a inicios del 2026 en colaboración con Savage Lands, fundación de Dirk Verbeuren -baterista de la banda Megadeth, la cual utiliza regalías generadas por música para comprar tierra para conservación en Costa Rica.
El evento es producido por Costaphonics, Deadly Rhythm y Destiny Recordings, con el respaldo de marcas como TAMA, Zildjian, Vic Firth, Drumshop CR y Corazón de Oro Tatuajes. Las entradas tienen un costo de ₡9.000 y están disponibles vía SINPE Móvil al 7215-3521, con cupo limitado.
Ben Koller
Considerado uno de los bateristas más influyentes de la música contemporánea, Ben Koller comenzó a tocar a los 14 años y en 1999 se unió a Converge, grabando el icónico Jane Doe (2001). Su estilo, descrito como explosivo y narrativo, lo convirtió en un referente dentro del hardcore y el metal experimental.
A lo largo de su trayectoria ha formado parte de proyectos como All Pigs Must Die y Mutoid Man, este último junto a Stephen Brodsky (Cave In), con discos aclamados como Bleeder (2015) y War Moans (2017). En 2015 se sumó al supergrupo Killer Be Killed, con figuras como Max Cavalera y Greg Puciato, y más recientemente giró como baterista en vivo de High on Fire. También ha colaborado con The Armed y Carpenter Brut, mostrando una versatilidad.